Puente de Piedra de Zamora: un viaje por la historia sobre el Duero
El Puente de Piedra de Zamora es uno de los grandes símbolos de la ciudad. Cruza el río Duero desde hace casi nueve siglos, conectando el casco histórico con los barrios de la margen izquierda. Su silueta, junto a la catedral y la muralla, forma una de las postales más reconocibles de Zamora.
En 2025, tras una completa restauración, el puente ha sido reabierto al público como un paseo peatonal que combina historia, paisaje y arquitectura medieval.

🌉 Un puente medieval con siglos de historia
El actual Puente de Piedra fue construido en el siglo XII, durante la consolidación cristiana de la ciudad. Desde su origen, fue parte esencial de la Vía de la Plata, permitiendo el paso de comerciantes, peregrinos y tropas entre el norte y el sur peninsular.
Se levantó en piedra arenisca y granito local, y aunque originalmente tuvo 22 arcos apuntados, hoy se conservan 15. Su carácter de puente medieval sigue siendo evidente a pesar de las reformas sufridas a lo largo de los siglos.

🏗️ Restauración reciente (2023–2025)
Tras años de desgaste, el Puente de Piedra fue objeto de una importante restauración, finalizada en marzo de 2025. La intervención incluyó:
- Consolidación estructural del conjunto
- Sustitución del pavimento deteriorado
- Eliminación de elementos no originales
- Instalación de iluminación ornamental para resaltar su arquitectura
Gracias a esta actuación, el puente ha recuperado su esplendor y se ha convertido en un espacio 100% peatonal, seguro y accesible, ideal para pasear, hacer fotos y contemplar la ciudad desde otra perspectiva.

🏛️ Ruinas del puente antiguo: una historia aparte
Unos metros río abajo del Puente de Piedra se encuentran los restos del Puente Viejo o también conocido como Puente de Olivares. Durante años se creyó que era romano, pero estudios recientes lo sitúan en época altomedieval o altoimperial.
Hoy, estas ruinas forman parte del paisaje fluvial y añaden un valor histórico extra al entorno del Duero. Se pueden observar desde el Paseo de los Tres Árboles o bajando a la ribera en la zona del barrio de Olivares.

🌅 Qué ver desde el Puente de Piedra
Pasear por el puente permite disfrutar de algunas de las mejores vistas de Zamora:
- Al norte, el perfil del casco antiguo, con la Catedral, el Castillo y la muralla
- Al sur, la ribera del Duero, con sus árboles, aceñas y caminos fluviales
- A ambos lados, la luz del atardecer tiñendo la piedra y el agua de tonos dorados
Es un punto fantástico para hacer fotografías o simplemente detenerse y contemplar el paisaje.

🖼️ Galería de imágenes
Imágenes reales del puente restaurado, las vistas al río, detalles de los arcos y del entorno natural.
💡 Consejo local
Si puedes, visítalo al caer la tarde. La iluminación ornamental instalada tras la restauración hace que el puente brille con luz propia. Además, es uno de los mejores sitios para ver la ciudad desde fuera de las murallas.
Y si tienes tiempo, acércate a ver las aceñas de Olivares o sigue el paseo junto al río hasta la playa fluvial.
🧭 Cómo llegar
Puedes acceder fácilmente al Puente de Piedra desde la Calle Balborraz bajando desde la Plaza Mayor. Desde el otro lado del río, el acceso es directo desde la Avenida de Vigo y conecta con rutas verdes y ciclistas.
🔗 Lugares cercanos
El Puente de Piedra de Zamora no es solo una vía de paso: es una pieza viva del pasado, restaurada con respeto y preparada para ser disfrutada por generaciones futuras. Cruza el Duero con calma, mira a tu alrededor, y entenderás por qué Zamora no se ganó en una hora.